La vida cotidiana
El primer paso de este ejercicio del “Desafío de la vida cotidiana” lo constituye la escucha de realidad. Pero la escucha hay que comprenderla y vivirla, especialmente en este primer paso, como:
- Una actitud de escucharme a mí mismo/a y de acogida de lo que yo vivo, para compartirlo desde lo más profundo.
- Escuchar, al mismo tiempo, a las otras personas para acoger lo que viven, piensan y sienten.
- Ver también lo que me dice a mí, y no tanto lo que le tengo que decir a las otras personas.
- Abrirnos para acoger la realidad de nuestro entorno, realidad, que nos trasciende, pero de la que no somos ajenos, puesto que incide en nosotros y de alguna manera podemos incidir en ella.