Nuestros Itinerarios
se han ido adaptando,
y experimentando para...
caminar juntos salir de la superficialidad mejorar como personas y ser constructores de humanidad.
Una manera de proceder
las líneas sobre las que nos movemos para hacer ejercicios que nos permite armonizar nuestra vida.
Compartimos nuestra experiencia
concretamos como se puede vivir una experiencia similar. El intercambio es posible de forma presencial y telemática, siguiendo unas mínimas pautas
Proceso transformador de nuestras vidas
En los diferentes Itinerarios que se ofrecen queremos dar la posibilidad de vivir un Itinerario espiritual, entendido como un “proceso de experiencia compartido y transformador de nuestras vidas”
Para comprender mejor, explicitamos el sentido y valor que le damos a algunos términos.
Cuando hablamos de un “Itinerario”, queremos decir que es un camino que tenemos que recorrer, algo que tenemos que realizar; esto no quiere decir que es algo que tenemos que lograr por nuestros propios medios, sino más bien algo que se realiza “en” nosotros, contando también “con” nosotros.
El itinerario es un proceso personal, vivido con otros, de mejora o transformación; no un curso de formación.
Como todo proceso humano tiene sus etapas, su inicio, su maduración, su momento cumbre…
Itinerario como proceso de transformación personal
Al afirmar que es “espiritual” nos referimos a esa dimensión profunda del ser humano, que, en medio incluso de la corporalidad y la materialidad, transciende las dimensiones más superficiales y constituye el corazón de una vida humana con sentido, con pasión, hasta con cierta ‘veneración’ de la realidad y de la presencia del Espíritu.
Lo espiritual es aquello que produce en nuestro interior una transformación, capaz de dar un nuevo sentido a la vida o de abrir nuevos campos de experiencia, profundidad y compromiso…
Cuando decimos “experiencia” nos referimos a "eso que me pasa". Hay experiencia humana cuando la persona se interesa y se pone en contacto con la realidad; trata de comprenderla y descifrarla, considerándola como algo que me está pasando a mí (la experiencia es siempre subjetiva) y siente la necesidad de comunicarla, lo que hace percibirla como más real y, además al compartirla, se va creando el ‘nosotros’…
Todo esto supone que el centro del “itinerario” es la vida de las personas -no un contenido que se quiere transmitir-, además al tratarse de un “ejercicio de intercambio”, el ritmo del proceso lo determinan las personas que quieren ejercitarse en el mismo.