En el mes de julio, en el transcurso de un encuentro, desempeñando el rol de moderador hubo una intervención, por parte de una persona, que expuso su opinión sobre lo que estábamos dialogando, que provoco en mí una reacción espontánea y con cierta ironía (un modo bastante frecuente de expresar los sentimientos de forma inadecuada) pues creía (justificación) que contradecía el argumento que yo venía sosteniendo, lo que provocó un cierto malestar en mí (creo que también en la otra persona), síntoma inequívoco de que mi reacción no había sido adecuada ni oportuna, aunque a lo mejor pudiera tener razón en lo que argumentaba.
Esta experiencia me ha llevado a preguntarme, pues no es la primera vez que me ocurre, ¿Qué es lo que guía mi conducta? ¿Son los valores que afirmo creer o son los sentimientos no controlados los que provocan mi modo de actuar?
Estoy convencido que hay que estar atentos a los sentimientos, pues son los que mejor nos hablan de nosotros mismos, son información de primera mano, pero sin duda esta es una señal de que tengo que adiéstrame aún por mucho tiempo, para saber discernir lo que siento en función de los valores que he decidió vivir, pues de lo contrario seré víctima de mis sentimientos y serán, en definitiva, los que guíen mi conducta.
Este es el camino que me propongo seguir para poder ser dueño de mis sentimientos, es decir, tratar de integrar los propios sentimientos en sintonía con los valores, sobre todo en los momentos en que se produzcan como reacción a algo que otras personas dicen o hacen:
* Ser más consciente de lo que siento, sobre todo en momentos conflictivos, ser capaz de dar nombre a lo que estoy sintiendo y aceptarlo, evitando ironías, justificaciones, culpabilizaciones…, que son modos de no querer aceptar lo que estoy sintiendo.
* Tratar de integrar y aprovechar la energía de los sentimientos en discernimiento con los valores que quiero vivir…
Creo que así podré ir creciendo en mis relaciones con las personas, sobre todo, con las que son diferentes, o piensan y siente de manera diversa.
Pepita
19 agosto,2011
No tengo mucha soltura en el manejo de estos artilugios, así que voy a hacer lo que pueda.
Me gusta mucho leer lo que escribís, no siempre voy a poder participar de forma activa, pero quiero que sepais que os voy siguiendo. Respecto a lo que dices que no sabes si tus reacciones fueron consecuencia de tus sentimientos no controlados debidamente, imaginate cual no ha sido mi sorpresa, puesto que tu, en comparacion conmigo eres muna persona que tiene un alto nivel de autocontrol, es lo que yo percibo. Asi que ya nos podemos imaginar como pueden llegar a ser mis reacciones.
Esta semana en la Rioja me ha venido muy bien (como siempre), estoy intentando poner en práctica el controlar mis reacciones puramente sentimentales e intentar ponerme en lugar de la otra persona (generalmente es Antonio). No se hasta donde llegaré, pero pongo mucho empeño en ello.
Sois todos maravillosos
Bueno, Nacho, supongo que en estos días de la Rioja aprenderemos un poquito más de todo esto que planteas. Por lo menos a mí me hace mucha falta, porque me cuesta la propia vida discernir si mi conducta es guiada por mis sentimientos o por mis valores. Si soy sincera, creo que más por mis sentimientos, aunque crea que van acompañados de mis valores…