Como en años anteriores, ofrecemos para el verano, oportunidades de encuentro,
de escucharnos y escuchar, de compartir experiencias,…
Tras hacernos conscientes de nuestra propia experiencia vivida y optar por hacernos discípulos de Jesús, ahora se trata de traducir y expresar vivencialmente esa experiencia en un estilo de vida cristiana que haga posible otra humanidad. Poner en práctica la conversión hacia una nueva humanización, un rehacer las relaciones, con nosotros mismos y con los demás. En definitiva manifestar que somos mujeres y hombres que vivimos de una manera nueva: en el pensamiento, en las decisiones, en las dificultades…
Para ver el programa con más detalle pulse aquí o en el menú de arriba en Encuentro 2017
Amigos en estos tiempos que vivimos se hace necesario despertar con urgencia nuestra conciencia Universal , no lo digo yo , lo dice Jesus en los nuevos mensajes entregados a humanidad atraves de Mercedes Miranda una mujer sencilla y humilde de Chile , atraves de ella jesus nos esta regalando nuevamente la sencilla formula para renacer a un nuevo mundo jesus nos llama a Amarnos los unos a los otros asi como el nos Ama y parcipar a diario en la cadena del Amor wwweditorialcadenadelamor.com.
El contenido del programa que se nos ofrece como encuentro para verano, describe unos pasos que, bien asimilados, conducen en el tiempo a una formación que nos capacita para vivir más cerca de Jesús y de los hermanos.- Pasos que, rigurosamente aprendidos y observados, van modelando la personalidad humana y moral del individuo.- Algo que debemos poner en practica en su conjunto, pues a medida que se conocen se han de ir ejercitando.- Sabemos que se hace camino al andar, los conocimientos adquiridos se pueden poner en practica siempre y en todo momento.- Me parece que lo fundamental es el crecimiento integral de la persona, y esto para un cristiano no puede esperar, el programa de vida cristiana, que es el Evangelio, no admite demora.- El seguidor de Jesús, es un apóstol, un enviado, tiene la urgencia de la caridad que dice san Pablo como horizonte y meta, para ser reflejo de lo mejor de este mundo, para transparentar la bondad y la misericordia de Jesús de Nazaret.-