Hace unos años que vengo animando, en la parroquia de mi pueblo, lo que se llama “cursillo prematrimonial”, cuya denominación no comparto por dos razones, la primera porque parece insinuar que antes de casarse hay que dar una serie de recomendaciones a los jóvenes… y la segunda, unida a la anterior, porque ignora la situación actual de las parejas jóvenes que vienen a casarse en la Iglesia, ya que bastantes de ellos viven una relación, digamos, estable…
Por mi parte he de decir que, a pesar de las condiciones de horario, falta de información previa etc., en que se realiza, es una gozada tener esa oportunidad de lo que yo llamo “encuentro con parejas jóvenes”.
Mi experiencia de estos encuentros, que he promovido en las parroquias en las que he estado, ha sido realizar la animación en equipo con tres o cuatro matrimonios y con un tiempo suficiente para la reflexión, el diálogo y momentos de plegaria.
Pero en esta ocasión, con la desventaja de realizarlo solo, de la prevención con la que generalmente viene las parejas jóvenes, cosa normal, pues cuando uno se acerca a la iglesia-parroquia se la dan consejos o se le pide dinero ciertamente por motivos muy justificados…
Han sido diez parejas formidables las que han participado, he partido de la situación que ya están viviendo, para hacerles en un estilo propositivo, que es posible otra manera de vivir la opción de casarse, y de casarse en la Iglesia.
No he tratado de ningún modo de convencerles, he intentado motivarles desde la vida sirviéndome de las ciencias humanas y desde la experiencia de una fe que es Amor acogido en nuestras propias vidas…
La falta de tiempo no ha permitido un diálogo explícito, pero yo he percibido, a pesar de esa carencia para mi importante, se ha dado un diálogo implícito que se manifestaba en la atención e interés con que seguían lo que se proponía desde mi propia experiencia de vida en grupo y, sobe todo, por las expresiones de sus rostros, las sonrisas contenidas, los comentarios con el compañero o compañera…
Al final, yo les he ofrecido mi disponibilidad para acompañarles y ofrecerles apoyo para seguir creciendo en sus relaciones como personas, como pareja, como creyentes, como ciudadanos…, pues las nuevas redes sociales lo favorecen. Les he informado de nuestro blog, en el que estamos promoviendo que SON POSIBLE OTRAS RELACIONES.
Pero creo que, reconociendo la autonomía de la juventud, habrá que poner en marcha, quizá sea esta la ocasión, crear un blog específicamente para jóvenes con el sugerente título: “JÓVENES POR UN MUNDO MEJOR”…
¿Lo queremos y lo podemos hacer? ¿Quién o quiénes están dispuestos a participar?
Esperamos reacciones
Desde Segovia, con algunas dificultades para conectarme a internet, me comprometo a:
Participar en los encuentros con jovenes, hace años que deje los «pre-matrimoniales», no me identificaba con los contenidos, la metodología, la convocatoria……..Tu propuesta me resulta atrayente.
La sugerencia de hacer un blog para «JOVENES POR UN MUNDO MEJOR», es posible, importante y puede ser un nuevo reto, manos a la obra.
Hasta la próxima. Que siga la lista de personas interesadas en el tema.