Desde hoy… la vida puede ser… de otra manera…
UNA CANCIÓN SIN OCASO
Cantemos al que hace entre nosotros
mucho más de lo que jamás pudimos soñar.
Al que ha alcanzado la cumbre de la vida
con su gran amor que lo condujo a lo más hondo de la muerte.
El Señor grita su eterna victoria
y descorre el velo que nos separaba
de la mesa de la justicia universal.



