Hace algunos años que he introducido en las actividades de mi vida cotidiana la meditación. Siento que es un beneficio para mí, me ayuda a vivir el momento presente, me encuentro serena, respiro mejor, he aprendido a pararme, por estas cosas y otras más es por lo que quiero compartirlo por si os animáis a practicar meditación o seguir saboreándola si ya la hacéis.
Acudo semanalmente a una meditación en grupo y a nivel personal, intento hacerla todos los días.
La persona que lleva la meditación semanal es Matilde de Torres Villagrá, este es su blog:
DESDE EL VACIO matilde.detorresvillagra.com
Os invito a entrar, a mi me sirve y me ayuda a seguir caminando, valorando a la persona, potenciando el mundo de las relaciones y favoreciendo mi deseo de compartir.
También me estoy acostumbrando a contestar estas preguntas al terminar el día.
1.- Sucesos significativos o mágicos del día.
2.- ¿Qué me ha enseñado y en que me ha beneficiado lo que no ha salido como yo quería?
3.- ¿A qué o a quién he beneficiado hoy?
4.- ¿De qué he gozado hoy?
5.- ¿En qué he progresado hoy?
6.- Agradecimiento del día
Seguiremos compartiendo.
Abrazos






En nuestro grupo de amigos hay una tradición desde hace unos años al empezar el curso: irnos un fin de semana a una casa rural en el maestrazgo de Castellón, con un lema muy sugerente. “anem a fer el que ens doné la gana” (vamos a hacer lo que nos dé la gana).

En un mundo en el que la imagen y las redes sociales ocupan con sus presencia todas nuestras vidas, (¿quién no tiene un móvil hoy en día?) todos nuestros hogares, los espacios públicos… curiosamente no es casual que bastantes personas de toda condición, entre las que me cuento, vamos sintiendo la necesidad de escapar de tanta solicitud externa que nos abruma y nos hace sentir la urgencia de ocuparnos más decididamente del mundo interior.